martes, 29 de diciembre de 2015


BOTSWANA



Puesta de sol, Moremi.

       País de superficie algo mayor que España y de escasa población, apenas superan los dos millones de habitantes, lo que lo convierte en unos de los países de África con menor densidad de población.

      En este bello y único país, podemos decir, que hay más animales que personas.

     Geográficamente, el país es extraordinariamente plano, con un 70% de su superficie cubierta por las  ardientes arenas  del desierto del Kalahari. Comparte fronteras con Sudáfrica al sur y sudeste, con Namibia al oeste y al norte con Zimbabwe al noreste y Zambia al norte.

   
     Viajamos con Goa Tours, como siempre. Aterrizamos en Maún capital del edén, capital del delta del Okavango. La ciudad se asienta fuera de la zona inundable del delta.

   Maún  se presenta como un collage, modernidad versus vida africana. Pequeñas tienda conforman un centro comercial al estilo occidental, eso sí,  salpicadas  de  cultura y costumbres  al más  puro estilo africano.  

    Dos horas después de aterrizar en  el aeropuerto de Maún, volvimos, ahora para sobrevolar en avioneta los cielos del delta del Okavango  en ese pequeño aeródromo, existe la mayor concentración de esas  aeronaves que he podido ver jamás.


aeropuerto de Maún


      El vuelo duró algo más de 30 minutos. A  baja altura y con las piruetas del experto piloto, divisamos grupos de impalas, búfalos  cebras, hipopótamos, jirafas, ñus,  tsetseve, manadas de elefantes  y un sinfín de otros animales cuyo nombre desconozco.


 
        Pero, sin duda, lo que nos dejó sin aliento fueron las vistas de las  serpenteantes y sinuosos lenguas de arena ramificándose entre la sedienta sabana y los  bosques de mopanes. Y,  por fin, vimos la joya de la corona, el  rinoceronte. Desgraciadamente  no volveríamos a ver más, ya que su población es muy escasa  y están custodiados días y noches por el ejército para protegerlos de los furtivos.

       El delta del Okavango , se produce por la afluencia de las aguas de las tierras altas de  Angola. Estas llegan luego desde Namibia   atravesando  la franja de Caprivi. Es único porque   no desaguan en el mar sino que forman un abanico fluvial  de laberínticos canales    en mitad del desierto    hasta desaparecer  por completo absorbido por las  sedientas arenas del  Kalahari.

                                                                                                 Paisaje típico del delta mopanes y juncos

       El delta  cubre una superficie de entre 15.000 km2  y 22.000 km2  dependiendo de  las crecidas.

     Se ubica en el noroeste del país conformando  una planicie de pantanos permanentes y de praderas inundables.

     Otra singularidad, es que, las crecidas se producen en la estación seca. Esto hace que las  especies animales y vegetales que la habitan  hayan adaptado su ritmo vital al de  las inundaciones y  las lluvias.

     Este ecosistema sin igual en todo el planeta alberga una riquísima vida salvaje, incluyendo los “ big five”; elefante, búfalo, rinoceronte, leopardo y león. Y los singulares  leones nadadores,  únicos también en el mundo animal , pues se ven forzados a cazar en zonas anegadas.


     Precisamente, uno de los momentos más intensos de todo el viaje se produjo en el safari en canoa. Ocupábamos un mokoro, pequeña embarcación  local. En uno de los muchos  islotes que se forma en el delta, contemplábamos a  un elefante. Se había descolgado de la manada. Lo seguimos con la mirada, y para nuestro asombro,  en un instante desapareció entre las aguas.  Al rato sólo logramos ver  parte de su cabeza y la trompa. Nadaba plácidamente.



   Lo seguimos durante todo su recorrido  desde nuestro mokoro  a escasos metros. Aquello duró varios  minutos.

    Ante esa belleza, yo sólo lograba decir ¡vaya espectáculo! ....... una y otra vez.






 Cuando nuestro paquidermo se iba acercando poco a poco a la otra orilla, nuestro guía-rastreador, en un acto de experiencia  y previendo  por donde saldría, se colocó en el lugar exacto vimos, con todo lujo de detalle, como aquel ser de  belleza extraordinaria emergía de las aguas.




      La luz era perfecta, casi al  final de la tarde, justo antes del ocaso los juncos daban un color ocre  a la escena, el reflejo del  agua la convertían en plata.

                                                                                      Este elefante con su majestuosidad nos emocionó a todos 

    Cuando me giré con la mirada desde mi fila de asientos del mokoro, de los ojos de mi amigo, brotaban dos lágrimas.

   
6 días 6, pasamos en campamentos móviles, 3  días con sus noches en la reserva de Moremi y otros 3 en Savuti.


   De día  veíamos los animales , de noche los oíamos.


     Las jornadas comenzaban muy temprano. A las 5:00 h de la mañana tocaban diana. Aseo, desayuno copioso para coger fuerzas y a las 6.00h  con las primeras luces del día estábamos listos para recorrer en nuestro Toyota descubierto las pistas de estas dos reservas naturales.      


      El grupo lo formamos 10 personas de diferentes edades,  todos entusiastas y ávidos de ver naturaleza y vida salvaje.
 

    La vida en las reservas naturales, tiene sus propias normas básicas de preservación y sostenibilidad. No se puede conducir antes de las 6.00 h de la mañana ni después de las 19.00 h con el propósito de perturbar lo mínimo posible la vida animal. Los vehículos tampoco  pueden salirse de los carriles marcados. A los ocupantes de los  todoterrenos  no se nos permite abandonar el vehículo. La caza está totalmente prohibida en esas zonas. Los emplazamientos de los  campamentos móviles están designados previamente y se deben levantar  como máximo al sexto día. Las concesiones se hacen a cuenta gotas y éstas se deben  reservar con muchos meses de antelación. Los guías van desarmados.

    Existen en los límites de las reservas naturales concesiones administrativas a empresas extranjeras, los conocidos  lodges, con leyes más laxas y donde , sí está regulada la caza, pero con  precios de pernoctación  sinceramente prohibitivos.

     Reserva de Moremi , debido a la caza sin control, el fuego,  la invasión del ganado y el furtivismo,  los habitantes de  la región de   Batawana  comandada por la viuda del jefe Moremi III tomaron la iniciativa de crear  una reserva. Corría el año 1963.

   Es la única zona protegida del delta del Okavango, constituyendo, por tanto,  un área de valor incalculable tanto  científicamente, como  ambiental y de conservación.

     La reserva se encuentra ubicada  en la zona central y oriental del Okavango, incluyendo la lengua de arena de Moremí y la conocida isla del jefe. En cuanto a fauna, se pueden contemplar los big five.
   




   Una mañana vimos unas de las imágenes más dura del viaje, una manada de leones había dado caza a un elefante.







                                                                                                                   Dos leones después de una cacería.

   Las escenas impactan,  pero no dejan de ser como es la vida en su estado más puro.

     Es igualmente muy rica en aves, se han llegado a registrar   más de 400 tipos de aves  diferentes, es paso también de migración con especies de incalculable valor ornitológico, algunas en serio peligro de extinción.
   












Ibis arrancando el vuelo.


         A media mañana, en zona de visibilidad animal,  hacíamos un alto para tomar  café, té y pastas. El lugar  estaba  escogido  con  premeditación  generalmente  no  lejos  de  alguna  charca,  pequeños momentos de descanso, grandes momentos para el espíritu.












      Savuti, es una reserva natural situada en el interior  del parque nacional de Chobe, en su zona oeste  y se corresponde con el área del pantano de Savuti y la zona del canal del mismo nombre.

   La zona del pantano es un vestigio de un gran lago interior que se secó y  del que últimamente están surgiendo de nuevo torrentes de agua provenientes del canal después de  décadas de sequía. Este hecho sigue siendo un misterio.


   
  Las épocas de sequía se han ido alternando con otras de abundancia de agua habiendo permanecido seco desde 1982 hasta el  2.010, año en que  brotó de nuevo el maná y  que se ha manteniendo  hasta la actualidad.

   Este surgir y desaparición del agua ha provocado que se encuentre una gran cantidad de árboles muertos a orillas del canal.


   En Savuti,  existen  grandes  claros en sus extensos espacios  lo que lo convierte en el hogar perfecto para los elefantes, el león y la hiena manchada

En las zonas montañosas del parque natural de Savuti se encuentran pinturas rupestres de los antiguos moradores de la región los bosquimanos. También, es lugar de grandes manadas de cebras Burchell.


Comedor de un lodge en Savuti 

 Alrededor del mediodía, regresábamos al campamento. El personal local nos tenía preparado con puntualidad inglesa el almuerzo. Siempre con amabilidad y alegría atendían a 10 desfallecidos turistas: carne, legumbres, pastas, verduras, regado siempre con un delicioso vino sudafricano. 


Durante las comidas y la sobremesa cada uno contaba las maravillas de la vida salvaje.


Dos jirafas en la reserva de Savuti
     En estos 6 días de campamento vimos, impalas, jirafas, cebras, ñus, facocero, búfalos, gran kudú, antílopes, chacales, leones, mangostas, ardillas, leopardo, serval, águilas, buitres, varanos, avestruz, hipopótamos, ibis, marabús, monos, cocodrilos , elefantes, escarabajos gigantes, chicharas de dimensiones descomunales   y un sinfín de animales de distinto pelaje. 


Calao. 

















Todos ellos con profusión.





           Animales en estado salvaje, en su hábitat. Libres.


Chica de Kasane 




     Después del campamento móvil, hicimos parada en los alrededores de la pequeña ciudad de Kasane, ciudad perfecta para abastecerse, hacer algunas compras y ver algo de artesanía.



     En esa pequeña localidad, encontré yo,  la chica con la  sonrisa más bonita de toda la región.








   Y llegamos al parque nacional de Chobe, los dominios del elefante. El parque nacional toma su nombre del rio Chobe,que hace de frontera natural entre Botswana y Namibia, está situado al norte del país,  a escasos 70 km de las cataratas Victoria en Zambia.

      De una superficie superior a 11.000 km  y desde 1968 en que se constituyó el parque nacional,  lo convierten en unos de los espacios protegidos más grandes del país
 


    Cría de elefante atravesando la carretera general, prioridad siempre a los animales. 


     Así mismo, este parque es conocido por poseer la concentración más grande de elefantes de toda África, rondando los 120.000 ejemplares.




    Chobe, es en realidad una llanura de arena del Kalahari con pequeñas colinas  rodeadas de varias cuencas fluviales. Su vegetación es más espesa en la ribera del río, y rala cuando nos alejamos con acacias y mopanes como especies más abundantes.
 
    La fauna, viene representada por los elefantes como gran dominador, pero encontramos mandas de cebras,  impalas, kudus, jirafas, babuinos, facoceros, e hipopótamo, entre otros.



 

                                                 



   
     En cuanto a depredadores, encontramos,  leones, chacales, zorros, serval, leopardo, guepardo, hiena, licaón. Y un verdadero paraíso para los ornitólogos con más de 450 especies diferentes.




     A este leopardo lo estuvimos siguiendo mientras divisaba a un grupo de impalas entre la hierba alta de las zonas anegadas en la reserva de Savuti    (Parque natural de Chobe). Contemplamos como se acercaba sigilosamente a las presas. Todos contuvimos las respiración. Lo perdimos de vista, pero sabíamos que se acercaba el momento del ataque. La excitación del grupo era evidente. Al rato una estampida de impalas frustró la  caza. 


               El momento fue muy intenso.

                                 El leopardo es una de las criaturas más hermosas  y elegantes del reino animal












 

     Es curioso, como estos animales en total libertad ignoran la presencia humana.


     Pero sin duda la particularidad del parque nacional de Chobe, es que en su territorio existen 4 ecosistemas diferentes; el área de Serondela, la zona de Savuti, la zona pantanosa de Linyanti y las cuencas de Ngwezumba.



       En esta zona del norte de Botswana, las puestas  de sol nos brindan un capítulo especial, allí el  color naranja se funde con los reflejos del agua. 


   Lugar de quietud, con  infinidad de aves buscando refugio en la vegetación alta de la ribera. 






                                                                          Y, navegar sus aguas al ocaso es un verdadero placer  para los sentidos.


      Atravesamos la frontera natural,  entre Botswana y Zambia, a través del mítico río Zambeze, y la oficial, previo pago de 50 $. Los tramites fueron rápidos y muy cómodos. Un vehículo nos esperaba al otro lado de la frontera, una hora escasa y estábamos en nuestro hotel, un hotel de lujo dentro del parque que alberga una de las mayores  maravillas que nos puede ofrecer la naturaleza, las cataratas Victoria.

    Las cataratas Victoria conforman la   frontera natural entre los países de Zambia y Zimbabue   y su caudal proviene del  río Zambeze.


   En la parte de Zambia las cataratas , pertenecen al distrito de Livingstone ciudad más cercana y del mismo nombre y del lado de Zimbabwe están en  la región de  Mashonalandia.

    Existe una unión de los dos países a través de  las cataratas por  el conocido  puente de las cataratas Victoria.  Un antiguo arco de acero terminado en 1905 y por el cual  caminando  podemos pasar  de un país a otro.

     Las cataratas tienen una anchura aproximada de 1,7 km y 108 metros de alto. Son un reclamo turístico para la región, dado el estrecho y raro abismo por el que cae el agua.

     David Livingstone,   famoso  misionero y explorador escocés, visitó las cascada en 1855 y las bautizó con el nombre  Victoria en honor a la reina de Inglaterra.  Aunque son conocidas localmente como Mosi-oa-Tunya, el humo que truena. 

      La cascada forma parte de dos parques nacionales. Parque Nacional de Mosi-oa-Tunya en Zambia y el  Parque Nacional de las Cataratas Victoria  en Zimbabwe,


Cataratas Victoria desde el lado de Zambia

    Las cataratas Victoria son  patrimonio de la humanidad  por la Unesco  desde 1989,  su superficie es de 8.780 hectáreas.



                                                         


                                               
                                             


    No me pude resistir sobrevolar en helicóptero las cascadas.





     La guinda a un viaje, sencillamente emocionante.






Recorrido y medios de locomoción empleados 






Guía

Cómo llegar:  No existen vuelo directos, hay que volar a Johannesburgo ( Sudáfrica) lo más rápido y económico es vía Londres, aunque este año 2016 Iberia  va a reabrir la línea Madrid-Johannesburgo en vuelo regular.

De Johannesburgo otro vuelo con air Botswana hacia Maun.

La vuelta una alternativa es Livingstone ( Zambia) a Johannesburgo (Sudáfrica ) y regreso a Madrid.

Coste de los vuelos aproximadamente 900 € dependiendo de la época del año.

Clima: El mes más  cálido es  octubre con temperaturas que sobrepasan con facilidad los 40 grados y noches calurosas, los meses  más fríos son junio y julio el termómetro  baja hasta los 4 grados centígrados  de  mínima.

Vacunas :  Profilaxis contra la malaria es recomendable.

Moneda: La moneda en Botswana es la pula, 1€ equivale a 11 pulas aproximadamente.

Conducción: Se conduce por  la derecha como en Reino Unido